Article publicat a Antena 3.
La Sociedad Americana de Farmacéuticos ha alertado del aumento del consumo de medicamentos diseñados para peces por personas que quieren ahorrar dinero y evitar ir al médico.
- Los hallazgos ‘alarmantes’ han llevado a los expertos a advertir que el uso de antibióticos para animales podría causar efectos secundarios
- Los antibióticos para mascotas, incluida la penicilina, están disponibles poco más de ocho euros
La Sociedad Americana de Farmacéuticos del Sistema de Salud (ASHP) ha alertado de que los estadounidenses han comenzado a tomar medicamentos diseñados para peces porque quieren ahorrar dinero y evitar ir al médico. Los antibióticos para mascotas, incluida la penicilina, están disponibles online por tan solo 8.99 dólares (poco más de ocho euros).
Los científicos han detectado que las compras de antibióticos no regulados en el tratamiento de infecciones humanas son populares entre las personas enfermas de Estados Unidos. Los hallazgos ‘alarmantes’ han llevado a los expertos a advertir que el uso de antibióticos para animales podría causar efectos secundarios y no ser seguros para las personas.
También es poco probable que curen una infección, lo que significa que los síntomas del paciente podrían empeorar mientras que las bacterias podrían generar resistencia a los medicamentos. El uso de antibióticos sin la receta de un médico es uno de los principales impulsores de la resistencia a los antibióticos, una amenaza global que hace que las infecciones básicas sean cada vez más difíciles de tratar.
Según publica Daily Mail, este estudio ha sido realizado por la Sociedad Americana de Farmacéuticos del Sistema de Salud (ASHP), pero no se ha podido determinar cuántas personas han comprando y usado los medicamentos para animales.
La investigación ha encontrado un aumento de las búsquedas de antibióticos para peces en uso humano. Los medicamentos para peces pueden presentar un problema ya que se pueden comprar sin receta médica, mientras que los destinados a perros o gatos no. El doctor Brandon Bookstaver, uno de los investigadores de la Universidad de Carolina del Sur, señala que “si bien el consumo humano de antibióticos para peces es bajo, cualquier consumo humano de antibióticos destinados a animales es alarmante”.
“La automedicación y la disponibilidad de antibióticos sin supervisión médica podrían contribuir a aumentar la resistencia a los antimicrobianos y retrasar el tratamiento adecuado. Nos preocupaba especialmente que el alto volumen de comentarios positivos sobre los comentarios sobre el uso humano podría alentar a otros a intentar usar estos medicamentos”, asegura el doctor.
El estudio ha encontrado que muchos de los medicamentos son los mismos antibióticos que se recetan a las personas: amoxicilina, penicilina, ciprofloxacina, cefalexina, metronidazol y sulfametoxazol-trimetoprima.
Medicarse con estos antibióticos puede suponer un verdadero riesgo:
- Aunque sean más baratos y fáciles de conseguir, pueden tener consecuencias negativas muy graves en la salud
- A diferencia de los antibióticos para humanos u otros animales, estos medicamentos no están completamente regulados por la Administración de Drogas y Alimentos
- Las pastillas parecen iguales pero es imposible saber que los medicamentos comprados online contienen lo que dice la etiqueta y son seguros para los humanos
- Los antibióticos, como todos los medicamentos, deben dispensarse en una farmacia autorizada después de un diagnóstico y prescripción médica